Segunda Guerra Mundial 

Conflicto bélico que entre 1939 y 1945 enfrentó a los países del Eje: Alemania, Italia y Japón, con los aliados: Francia, Reino Unido, URSS y EEUU, principalmente. Fue causado por la política expansionista de Alemania y Japón y por los desequilibrios que había ocasionado la Primera Guerra Mundial, en especial las durísimas reparaciones de guerra impuestas a Alemania en el tratado de Versalles (1919) y la aparición de un Estado socialista en el E de Europa, la URSS, que suponía una amenaza para Occidente y frente al cual se permitió el rearme de Alemania. El III Reich incorporó Austria y se anexionó los Sudetes en 1938 y ocupó Checoslovaquia en 1939, mientras Italia se apoderaba de Albania, todo ello ante la impasibilidad de los aliados.
En 1939 se produjo la firma del tratado de no-agresión germano-soviético, que permitió la invasión alemana de Polonia, ante lo cual el Reino Unido y Francia declararon la guerra a Alemania. Su primera fase fue de triunfos del Eje: Alemania, en la guerra relámpago, penetró en Dinamarca, Noruega, Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo y llegó hasta París, forzando la capitulación de Francia; posteriormente ocupó Rumania, mientras Italia invadía Grecia. Por su parte, el ejército soviético entró en Finlandia, Lituania, Letonia y Estonia. En 1941, Alemania invadió Grecia y Yugoslavia. Tan sólo resistían la Inglaterra de Winston Churchill, sometida a fuertes bombardeos de la aviación alemana, y el gobierno francés en el exilio presidido por el general De Gaulle. Este mismo año Hitler rompió el pacto de no-agresión y atacó a la URSS, llegando a las puertas de Moscú, y Japón bombardeó la flota de EE UU estacionada en Pearl Harbor.
La entrada de URSS y EE UU en guerra contra el Eje cambió el desarrollo del conflicto. En 1942, los aliados desembarcaron en África e impidieron a Rommel apoderarse de Egipto; con el apoyo americano la URSS resistió en Stalingrado y, en 1943, pasó a la ofensiva; los aliados liberaron Túnez y Sicilia y penetraron en Italia, consiguiendo la capitulación italiana y la expulsión de Mussolini. En 1944, los avances continuaron con mayor fuerza: tras los desembarcos de Normandía y Anzio fueron liberadas París y Roma, respectivamente; las fuerzas estadounidenses comenzaron a desalojar a los japoneses de Birmania y las islas del Pacífico; y los soviéticos ocuparon los países del E de Europa. En 1945 capituló Berlín y Alemania se rindió incondicionalmente; poco después EE UU arrojó sendas bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki, mientras la URSS invadía Manchuria, lográndose la capitulación de Japón.
La guerra produjo la pérdida de 40 millones de vidas e incalculables daños materiales. En las conferencias de Teherán, Yalta y Potsdam los vencedores Roosevelt, Churchill y Stalin acordaron un reparto de Europa en dos áreas de influencia, lo que provocó el principio de la guerra fría; Alemania quedó dividida y comenzó el proceso de descolonización de Asia y África.
Pol. guerra fría EE UU y la URSS no estuvieron enfrentados nunca en una guerra declarada entre ambos países o sus respectivos bloques, pero sus relaciones pasaron por momentos de gran tensión (crisis de los misiles en Cuba, en 1962) y en numerosas guerras localizadas cada bando apoyó a un contendiente (Corea, Vietnam, conflicto de Oriente Medio, Afganistán). Después de la mejora de relaciones que supuso la llegada de Kruschev al poder a mediados de los años cincuenta y el empeoramiento que siguió a la de Breznev, la tensión entre las dos grandes potencias volvió a disminuir tras el nombramiento de Gorbachov como máximo líder de la URSS.
guerra nuclear Hasta el presente las armas nucleares sólo se han utilizado en el bombardeo realizado en 1945 por EE UU contra las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, que puso término a la Segunda Guerra Mundial. Actualmente poseen armamento atómico EE UU, algunas repúblicas de la desaparecida URSS, China, Francia, Reino Unido, India y posiblemente Israel, pero sólo EE UU y las repúblicas exsoviéticas lo tienen en cantidad suficiente para desarrollar una guerra nuclear total, es decir, con capacidad de destrucción absoluta de la potencia enemiga. Estudios de simulación han demostrado que la guerra nuclear produciría una serie de efectos capaces de terminar con la vida en la Tierra. Esta posibilidad ha favorecido la firma de diversos tratados de limitación de armas estratégicas y de pruebas nucleares, pero su alcance aún se considera insuficiente.